Alcohol

Los síntomas de la adicción al alcohol son la ansiedad por consumirlo, pérdida del control, incapacidad para parar de beber, dependencia física, que provoca el síndrome de abstinencia (sudoraciones, fiebre, temblores) cuando se deja de tomarlo, y la tolerancia (necesidad de beber cada vez mayores cantidades de alcohol).Además, el consumo excesivo de esta droga conlleva graves problemas de salud, tanto mentales (depresión, psicosis) como físicos (daños en hígado, cerebro), e incluso la muerte.

Cannabis

A un nivel cognitivo, el cannabis afecta a los procesos de memoria y aprendizaje, y provoca en los consumidores un mayor desinterés en las actividades cotidianas y rutinarias de su vida. Por otro lado, se produce sequedad bucal, debido a que determinados ingredientes activos de la marihuana afectan a la secreción de saliva. También pudiera suceder un enrojecimiento de los ojos, sudoración excesiva, broncodilatación y aumento de la presión arterial. Cuando existe un consumo elevado de THC, los efectos del cannabis pueden incluir alucinaciones, delirios, mareos, náuseas fuertes y vómitos, confusión, ansiedad, paranoia, y aumento del ritmo cardíaco.

Cocaína

La cocaína se suele consumir repetidamente y en dosis cada vez mayores, lo que puede conducir a un estado de irritabilidad, inquietud y paranoia e incluso puede causar un episodio total de psicosis paranoica en el que se pierde el sentido de la realidad y se sufre de alucinaciones auditivas. Al aumentar la dosis o la frecuencia del consumo, también aumenta el riesgo de sufrir efectos psicológicos o fisiológicos adversos.

Fármacos

El abuso de medicamentos recetados, un problema cada vez mayor, puede afectar a todos los grupos etarios, incluidos los adolescentes. Los medicamentos recetados de abuso más frecuente incluyen analgésicos opioides, sedantes, medicamentos ansiolíticos y estimulantes.La identificación precoz del abuso de medicamentos recetados y la intervención temprana pueden evitar que el problema se convierta en una adicción.

Pastillas

El principal efecto del MDMA es sobre el cerebro ya que aumenta la actividad de como mínimo tres neurotransmisores: serotonina, dopamina y norepinefrina. Al igual que hacen otras anfetaminas, el MDMA aumenta la liberación de estos neurotransmisores y bloquea su reabsorción por lo que sus niveles se incrementan. A su vez, esta droga libera más serotonina y norepinefrina que dopamina. La serotonina es un neurotransmisor que cumple una función importante en la regulación del estado de ánimo, el sueño, el dolor, el apetito y otros comportamientos.